En México, se han otorgado 193 autorizaciones de siembra de maíz transgénico

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En el contexto de la resolución emitida por el Juzgado Federal Décimo Segundo de Distrito en Materia Civil, en el Distrito Federal, en la que se establece la suspensión de siembra de maíz transgénico en cualquiera de sus fases (experimental, piloto o comercial) a nivel nacional, Catherine Marielle, coordinadora del Programa Sistemas Alimentarios Sustentables del Grupo de Estudios Ambientales (GEA), comentó que hasta ahora el gobierno ha entregado 193 permisos de siembra de maíz transgénico: 168 en fase experimental y 25 en fase piloto. Aclaró que, en cuanto a siembra comercial, no se ha entregado autorización alguna aunque fueron solicitados alrededor de 9 permisos.
Las principales empresas a las que se les ha otorgado autorizaciones son: Monsanto, Dow AgroSciences, Phi México y Syngenta. Los estados en los que se ha sembrado una mayor cantidad de maíz transgénico en fase experimental y piloto son Sinaloa, Tamaulipas, Chihuahua y Sonora.

Uno de los argumentos que se hacen valer en la Acción Colectiva interpuesta el 5 de julio de este año, es que existe evidencia de contaminación transgénica de maíces en los estados de Oaxaca, Sinaloa, Chihuahua, Veracruz y Guanajuato; entidades donde su cultivo ni siquiera fue autorizado, lo. Esto revela la ineficiencia de los límites y restricciones establecidas en la Ley de Bioseguridad de Organismos Genéticamente Modificados (LBOGM).

Caterine Marielle afirmó que respecto a los resultados de las siembras piloto y experimental, el gobierno no ha dado a conocer cuáles han sido las implicaciones de su cultivo: “Ni siquiera los investigadores públicos pudieron acceder a los datos que arrojaron las siembras experimentales, se supone que es experimental para ver cuáles son sus efectos y pues toda esta información se mantiene confidencial”, comentó.

Uno de los aspectos preocupantes en cuanto a contaminación por transgénicos se refiere, es que esta no solo se da a través de las autorizaciones de su siembra sino también por la distribución de semillas a través de programas gubernamentales como Diconsa. Catherine Marielle mencionó que el gobierno debe cuidar las actividades de las proveedoras de semillas híbridas, pues hay pruebas de contaminación por comercialización, específicamente en el estado de Chihuahua.

Finalmente, la también integrante de la Campaña Nacional Sin Maíz No Hay País, invitó a la ciudadanía a estar alerta, pues, señaló, una fase importante en la lucha por la preservación de la agrobiodiversidad nacional apenas comienza.

El maíz es el principal alimento del pueblo de mexicano, de él proviene el 53% de la ingesta calórica y el 22% de la proteínica. Su consumo por habitante se encuentra entre los más altos del mundo: cada año consumimos de forma directa entre 115 y 150 kg. de maíz por persona.

En México, existen 62 grupos étnicos que han heredado la mayordomía de más de 59 razas nativas y de miles de variedades locales. Estos maíces están asociados a los más de 600 platillos que componen la cocina mexicana.